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domingo, 13 de octubre de 2013

RESEÑA de "Diástole" de Emilio Bueso

Emilio Bueso con un ejemplar de Diástole

Bueno. Diástole. Si en su último libro, Esta noche arderá el cielo, Emilio nos presentaba a lo que podríamos llamar como "drogas médicas", en este nos presente a un yonqui tal cual. Jérôme es un pintor del que era de los buenos, de los notarios, de los que caen en desgracia, de los yonquis. De los que viven al límite y que nos llevará a situaciones del mismo calibre. Al límite, al borde.

Durante las páginas del libro Emilio nos presenta a un personaje que pudo ser mucho pero que se quedó por el camino. Un corazón roto y unas malas compañías, a parte de lo que podría ser su ya predisposición previa, convierten a alguien incipiente en un malvividor. En un don nadie. En un mindundi en el que se va a fijar un tal Iván, una figura perseguida en Moscú, que según me dio a entender el resumen esperaba que fuera un criminal, un forajido. Y así me pareció al principio. Pero yo, lista que soy, y por mi misma (ni que la portada del libro fuera un destello bien claro y conciso de ello), me di cuenta de que este Iván no es lo que parece. Vamos, que no es como que no vaya diciendo constantemente que no tiene años, que hace siglos, que no tiene alma, que es un monstruo sin sentimientos... es que yo soy muy aguda jajaja

El caso es que este tal Iván contrata a este pintor caído en desgracia para que, durante 4 noches consecutivas, vaya a su mansión (muy lovecraftiana ella, misteriosa, y medio podrida también; con un Igor con otro nombre guardando la entrada) y le retrate. Pagando una generosa suma, por cierto. Al principio, Jérôme se lo piensa un poco, pero entre peleas con su viejo coche y pinchazos de heroína decide que lo hará. ¿Por qué no? Total, no es que ya tengo mucho que hacer de por sí... ¿no?

Y el libro nos introduce así a Iván, a su pareja, al portero Igoresco de la mansión, a dos perrazos, a unos "espías/soldados" y a una trama curiosa mientras Iván le va contando durante cada noche a Jérôme un trozo más de su historia, de su vida, dejándole entrever qué es aquello que ha de pintar, llevándonos en un increíble viaje por una vida de lucha y curiosidades, pasando por escenarios peliagudos, como lo pueden ser el asedio de Leningrado o el accidente de Chernóbil... hasta el momento actual de la petición del cuadro. Y su por qué. Y sus consecuencias.

Personalmente, lo que más me ha gustado de esta novela ha sido el motivo del cuadro, ese por qué; así como esa necesidad de explicar su vida, como de hacer un resumen de un libro, de una historia, antes de darlo por leído, concluido, cerrado. Y el desenlace tras ello.
Por otro lado, la figura de Iván también me ha llamado la atención, su historia me ha gustado. Pero... no es lo que me esperaba de uno de su clase. Quizás ya era la idea de su autor, de humanizarlo y deshumanizarlo a la vez. Humanizarlo por que no parece ser demasiado monstruoso por  mucho que al principio de su historia se esfuerza por contarnos lo "chungo" que era para luego embobarse perdidamente de un "encargo", por así llamarlo y girar el turno de su historia debido a ello; y a la vez, suficiente deshumanizado como para poder vivir rodeado de radioactividad, demostrándonos que no le afecta, que no es humano, así como usar ciertas cosas para su salvaguarda. Pero todo esto ya son caborías mías, por que es obvio que cada uno de nosotros leemos lo que nos llama, lo que "queremos" sobre un texto estipulado. Lo que sí que nos encontramos son unos personajes en situaciones límite (ya sea por decisión propia como es el caso de Jérôme y su drogadicción; como forzada como Iván en Stalingrado) en escenarios límite en el caso de Iván.

Lo puedo seguir recomendando como hice con Esta noche arderá el cielo por su tono oscuro, por la cruel claridad en la que según qué aspectos son tocados (la drogadicción de Jérôme, el escenario que se nos presenta en Stalingrado, o los motivos de que la pareja de Iván desaparezca); lo inusitado de la novela pese a ser un tema tocado hasta la saciedad (persona buena se convierte en vampiro chungo pero se enamora de nena mona); y por que sigue siendo una curiosa novela de terror (aunque mucho terror no le acabo de  ver... como no sea el terror del miedo que nos tiene que dar en ocasiones la humanidad y a lo que puede llegar...). El que ganará un Celsius... pues también podría ser motivo para recomendarla jajaja ;)

Informaciones secundarias:

Sinopsis de la contraportada del libro:
Jérôme es un pintor caído en desgracia que recibe el encargo de retratar a Iván, un misterioso extranjero cuyo pasado irá revelándose a medida que nos relate su historia durante las sesiones de posado.
Jérôme conocerá así la historia de un hombre perseguido por Moscú durante décadas; un forajido que tuvo que recorrer a la fuga los escenarios más duros de la extinta Unión Soviética, sobrevivir al asedio nazi de Leningrado, desaparecer en las noches de San Petersburgo durante los días más crudos de la dictadura, esconderse en las zonas más contaminadas de Chernóbil... La auténtica naturaleza de Iván se nos revelará cuando conozcamos el antiguo y terrible mal que porta consigo, hecho a partes iguales de radiactividad y de una espantosa maldición que habita en el corazón del arte pictórico.

Diástole es un viaje febril que bombea terror y novela negra, dentelladas a la yugular y chutes de heroína, plutonio y poesía. Una corrosiva historia de amor y fatalidad que abre de un hachazo un nuevo registro en la actual narrativa de terror española.


Información del libro:
Del autor ganador de dos premios Celsius consecutivos, 2011 y 2012 (Diástole y Cenital).
Editorial:
SALTO DE PÁGINA
Colección:
PURPURA29
Género:
NOVELA
ISBN:
978-84-15065-07-4
Precio con IVA: 18,00€





viernes, 11 de octubre de 2013

RESEÑA de "Esta noche arderá el cielo" de Emilio Bueso



Por dónde empezar... tanto que contar y no saber por dónde empezar, no querer contar spoilers, en fin... empecemos por el principio.

La verdad es que yo no conocía nada de Emilio Bueso. Pero nada. Así que busqué algún fragmento de algo suyo para leer, y su estilo tan personal y distinto me atrapó. Así que fui y me compré dos de sus libros, el que ocupa esta reseña, y Cenital.

Cuando empecé su libro no sé qué esperaba, pero no lo que encontré. Recuerdo empezar a leerlo y alucinar. Llegué a pensar a las pocas páginas que su forma de escribir, tan adjetivada, tan cargada de significado, tan llena… no sé cómo describirla, pero única, eso sí, a lo mejor podría parecerme cargante a la larga. Ni mucho menos. Con este hombre todo tiene su lugar, su momento, su por qué, como no tardé en descubrir.

¿De qué va el libro? Oh, pues parece que de la cosa más normal del mundo. Nos cuenta la historia de Mac y de su “chica” que cogen sendas motos para ir a recorrer la Trans-taiga, la carretera más larga y solitaria del norte canadiense, para sentirse vivos de nuevo, vibrando con el asfalto bajo las ruedas de su moto, el acelerador bajo un puño… Y a la vez, la historia de un astrónomo, de un padre, que va a ver las estrellas y las auroras boreales con su hijo. Una “ñoñez”, ¿no? Quizás. Hasta que metes fenómenos paranormales, indios crees traficantes, una mercancía peculiar, y tienes una road movie con tintes de western y de terror. Porque la mercancía no es una mercancía cualquiera, no. Está viva. Sentiente. Salida de la mente de un científico loco que se cree Dios. Y el libro va hilando complicadas historias, reflexiones que no son sólo lo que el autor cuenta, si no lo que te hace reflexionar mientras lo lees.

Recuerdo comentarle a Emilio cuando tuve oportunidad de verlo lo que más me había sorprendido de su libro (aviso de que pueden venir spoilers). Lo que más me sorprendió es una reflexión de Mac, el prota del libro, neuras, con ataques de ansiedad, abandonado, perdido, soltado de la mano de Dios, pero que a lo largo de la historia tiene los huevos (perdón) de enfrentarse a sus miedos, a su mismo, a su reflejo en un monstruo, viendo que el monstruo es hombre, el hombre es monstruo… pues en cierto momento del libro, cuando parece que viene el final feliz, las perdices, la escena ñoña, Mac se ve enfrentado a una visión que le hace replantearse todo. Y una pregunta viene a su cabeza. ¿Quién es el verdadero monstruo en esta historia? Y a la vez que él se lo plantea lo haces tú también. Y te respondes. Y analizas, Y flipas. Porque un libro no solo te cuenta lo que lees, si no lo que está dicho entre líneas, y en este caso, lo que lees entre líneas es brutal. Por que como me dijo Emilio y yo también comparto, a veces el hombre, el ser humano, puede ser el peor de los monstruos.

Si queréis leeros algo nuevo, algo distinto, ácido, crudo y que no os dejará indiferentes, dadle una oportunidad a este hombre. Que en serio que la merece, y que en serio no os defraudará.

Informaciones secundarias:

Sinopsis de la contraportada del libro:
La Trans-taiga es la carretera más larga y solitaria que puede recorrerse en el vasto norte canadiense: más de seiscientos kilómetros a través de un desierto boreal que mueren de pronto junto a un embalse abandonado. Un sitio que cruzar en moto, donde perderse con una mujer casada, acampar bajo la fosforescencia de la aurora y la lluvia de estrellas. Ése era en un principio el plan de Mac. Mac es un tipo que a veces necesita medicación y cuyos planes, a menudo, salen mal. Mac entiende de carburadores, de ataques de pánico y de y de rock and roll. De lo que no entiende Mac es de avionetas de contrabandistas en vuelo rasante, de armas biológicas y ancestrales secretos de los indios cree. Y va a tener que aprenderlo todo en una noche.

Información del libro:
Del autor ganador de dos premios Celsius consecutivos, 2011 y 2012 (Diástole y Cenital).
Editorial:
SALTO DE PÁGINA
Colección:
PURPURA
Materias:
NARRATIVA AUTORES ESPAÑOLES;
ISBN:
978-84-15065-48-7
EAN:
9788415065487


Precio con IVA:
18.00 €